Cuando una persona sufre un accidente de tráfico uno de los síntomas que siempre se tienen es una sensación de impotencia, de riesgo inminente, de ver cerca la muerte. Por eso muchos lesionados refieren síntomas de infarto, dolor en el pecho etc tras un accidente. En algunos casos llegan a ser reales y la persona fallece a los pocos minutos del accidente debido al impacto emocional. En las mayorías de los casos se queda como un ataque de ansiedad que se reduce con medicación cuando intervienen los servicios médicos de asistencia.
De hecho en muchas ocasiones estas síntomas derivan en secuelas psicológicas que son tenidas en cuenta en la reclamación de indemnizaciones por accidentes de tráfico y aparece el stress postraumático como uno de las secuelas psicológicas más comunes en los accidentes en carretera.
Los síntomas de infarto en los accidentes de tráfico también son muchas veces debidos a las contusiones o fisuras en el externón que se reflejan con un dolor punzante y agudo en el pecho que puede en muchas ocasiones ser confundido con un síntoma de infarto
